Jalen Brunson hizo su regreso triunfal a la cancha liderando la mejor actuación defensiva de los Knicks desde 2012, limitando a los Magic a tan solo 74 puntos.
El base, producto de la formación en Villanova, anotó 26 puntos con un impresionante 11 de 19 en tiros de campo, poniendo fin a la racha de tres derrotas consecutivas de los Knicks en el Madison Square Garden.
«Jugamos muy bien de principio a fin», resaltó Thibodeau al diario NY Post.
Con una victoria por 98-74, los neoyorquinos recuperaron la cuarta posición en la Conferencia Este con un récord de 37-26, arrebatándosela a los propios Magic (37-27), quienes venían de una racha de 5 triunfos consecutivos.
La impactante contribución de Brunson fue evidente desde el principio, anotando 10 de sus 26 puntos solo en el primer cuarto y liderando un parcial de 21-9 en los primeros 7 minutos del encuentro.
Los Knicks cerraron la primera mitad con una ventaja de +14 en el marcador y la ampliaron a 26 puntos a mediados del tercer cuarto.
Por su parte, los Magic, que previamente tenían una ventaja de 3-0 en sus enfrentamientos contra los Knicks esta temporada, nunca lograron liderar en el marcador, con un pobre 34% de acierto en tiros de campo y un 23% en triples.
«Fuimos muy agresivos con el balón. Sin él… Hoy las rotaciones han funcionado. Estábamos perfectamente sincronizados», señaló Josh Hart.
Otros destacados de los Knicks fueron Precious Achiuwa con 15 puntos, 14 rebotes, 4 asistencias, 2 robos y 5 tapones, Hart con 19 puntos, 7 rebotes y 4 asistencias, y McBride con 14 puntos desde el banquillo.
En el bando visitante, el máximo anotador fue Banchero con 23 puntos, 9 rebotes, 2 asistencias, 2 robos y 4 tapones.
Aunque Brunson sufrió una lesión ante los Cavs que inicialmente causó preocupación, el base se recuperó rápidamente, regresando con un desempeño destacado. «Pensé en mil situaciones distintas de lo que podría haber sido y me alegro de que no fuera así», admitió Jalen Brunson.
Enfrente, los Magic perdieron a su mejor defensor perimetral, Jalen Suggs, debido a una contusión en el muslo, y el resto del equipo no pudo encontrar una respuesta para frenar la actuación estelar de Brunson.
«No tienes nada más que respeto por él porque ha hecho todo lo posible para regresar», elogió Thibodeau. «Entrena dos veces al día. Se esfuerza mucho. Llega muy pronto y se va el último. Y vuelve por la noche y se somete al tratamiento», agregó el entrenador de los Knicks.
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